Quien manda, manda

La sala de reuniones, funcional y luminosa, estaba al completo. Alrededor de la impresionante mesa ovalada, una docena de ejecutivos encorbatados, sentados en unas sofisticadas sillas de diseño inverosímil, seguían atentamente las explicaciones sobre una nueva tecnología, que había despertado el interés de la institución donde trabajaban. Era un organismo dedicado a la promoción deSigue leyendo «Quien manda, manda»